lunes, 12 de noviembre de 2012

ME LLAMA LA ATENCIÓN


Muchas veces hemos oído la expresión sólo quiere llamar la atención, también la hemos presenciado y sabemos que debemos ignorarles para no reforzar esa conducta, pero ¿cómo hacerlo? ¿por qué un niño quiere llamar la atención?

Un niño quiere llamar la atención porque es su manera de pedir que le hagan caso, porque tiene una necesidad o una carencia determinada y no sabe cómo resolverla. Pide que le atiendan de la forma que él sabe perfectamente que sus papás le van a atender: portándose mal. Ya ha comprobado muchas veces la conducta que mejor le funciona para conseguir que vuestra atención esté fijada en él y, probablemente, en más ocasiones haya sido una conducta negativa que positiva.

Por ello, siempre os recomendamos ignorar este tipo de actitudes y recompensar las conductas positivas. Sí, ya lo sé, es muy bonito decirlo pero no tanto hacerlo. Pero, de verdad, tened paciencia, calma. No se debe responder al comportamiento inadecuado. No entréis en su juego. Es mejor que compruebe una y otra vez que ese juego no le sirve y le deis un alternativa que sí le funcione:

  • Enseñadle a expresar sus emociones y necesidades
  • Establecer hábitos y normas que le den seguridad
  • Encontrad tiempo para estar a solas con él
  • Facilitad la conversación con cariño y naturalidad: hablad con él y que os hable
  • Premiad la conducta positiva con recompensas no tangibles como por ejemplo, realizar juntos la actividad que él quiera. No es bueno abusar de la amenaza, es mejor motivar.
  • Transmitidle el mensaje de que todos los sentimientos son aceptables pero no todas las conductas (Sé que estás enfadado y te entiendo, pero deja de dar patadas al espejo porque se rompe. Cuéntamelo que te ayude)

Seguro que me diréis que no es fácil que un niño exprese sus emociones y hable de lo que le ocurre cuando en muchas ocasiones ni él mismo lo entiende. Es cierto. Por eso, vosotros, papás, debéis también separar conductas de sentimientos. No reaccionéis de inmediato con un castigo o un enfado,  contad hasta diez y pensar : ¿qué le ocurre a mi hijo? ¿por qué llama mi atención de esa manera? Sí, es difícil saberlo, lo sé: Inseguridad, miedo, tristeza, frustración, celos, un capricho,...Observar la conducta puede daros alguna pista:

  • ¿Sucede principalmente ante la presencia de una misma emoción (celos, miedo, tristeza, etc?
  • ¿Podemos identificar algún desencadenante: una separación, un nuevo hermano, cambio de colegio, etc?
  • ¿Suele darse con la misma persona?
  • ¿Cómo nos sentimos nosotros: estresados, preocupados, nerviosos? Nuestro estado influye en nuestro hijo
  • ¿En qué situaciones: al levantarse, al volver del cole, fuera de casa, al acostarse. etc?
Una vez os hayáis hecho una idea de qué origina el mal comportamiento de vuestro hijo (su conducta para llamar la atención) entonces, como recomendación general, yo os diría que os pusiéseis en su lugar e intentáseis pensar como él para entenderlo y ayudarle a tolerar su frustración. Explicarle claramente que casi nunca todos los deseos se cumplen. Y que eso, precisamente, es lo que tiene de emocionante la vida. El fracaso no es malo, sirve para avanzar.

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